Sonia Vásquez, consejera de Participación Ciudadana de Medellín y vicepresidente de la Unión de Ciudadanas de Colombia, manifestó su satisfacción con la aprobación en último debate del Proyecto de Acuerdo 160 de 2018, por el cual se crea la Política Pública para la Igualdad de Género de las Mujeres Urbanas y Rurales de Medellín.
La Política Pública, de iniciativa de la Alcaldía de Medellín, busca garantizar que todas las mujeres de la Ciudad tengan las mismas oportunidades y que puedan gozar de sus derechos sin discriminación alguna por razones de género, sexo, raza, procedencia, residencia o edad. Según Sonia Vásquez, esta Política Pública que amplía otros acuerdos aprobados en beneficio de las mujeres, traerá beneficios en las dimensiones de «autonomía económica», «educación», «salud», «participación social y política», «seguridad y vida libre de violencias» y «paz».
La también exconcejal Sonia Vásquez recuerda cifras que resaltan la importancia de esta decisión administrativa y política:
En Medellín, una hora de trabajo doméstico disminuye en 2,3% las posibilidades de acceso de la mujer al mercado laboral; 42% de las mujeres no tiene afiliación al sistema de pensiones; el 63,9% de los jóvenes que no trabajan ni estudian corresponde a mujeres; el 80% de las mujeres no se realiza pruebas de detección ni participa en actividades preventivas; de 235 candidaturas, el 21% fue de mujeres que se inscribió en las listas de los partidos políticos para aspirar al Concejo de Medellín; el 83,2% de las víctimas de la violencia de parejas corresponde a mujeres; el 87,4% de víctimas de violencia sexual fue de mujeres; de un total de 431.379 del Registro Único de Víctimas del conflicto armado que declararon en Medellín, 73% es de mujeres, y 112.507 mujeres fueron víctimas del conflicto armado, específicamente por hechos ocurridos en Medellín.
Sonia Vásquez celebra que con esta Política -en la que participaron la secretaria de las Mujeres, Valeria Molina, y las concejales Daniela Maturana (ponente), Aura Marleny Arcila, Luz María Múnera, Nataly Vélez y María Paulina Aguinaga- las mujeres puedan tener ingresos propios, ser económicamente independientes, gozar de garantías en salud –con énfasis en lo mental, lo sexual y lo reproductivo– y acceder a la educación y a la seguridad.
La Consejera de Participación Ciudadana de Medellín precisó que en lo único que se perdió en el debate es no haber logrado que el Consejo de Participación conformado no fuera «consultivo» sino un comité asesor. Pero que seguirán en el trabajo participativo en aras de lograr que sea un Consejo de Participación más deliberativo.
