Por primera vez se celebra este lunes, 7 de septiembre, el “Día Internacional del Aire Limpio por un cielo azul”, después de que la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptara la fecha y el propósito el 19 de diciembre de 2019.

Mediante invitación especial del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), todos los Estados miembros y las organizaciones de la ONU, los organismos internacionales y regionales y la sociedad civil, en general, están convocados a participar en acciones que permitan la toma de consciencia sobre el riesgo ambiental que representa la contaminación atmosférica para la salud humana.

“La contaminación ambiental es una de las causas de enfermedades respiratorias y de muerte en todo el mundo, pero es un riesgo evitable con consciencia sobre sus efectos nocivos sobre la salud humana”, afirma el representante a la Cámara Nicolás Albeiro Echeverry Alvarán, reconocido “Econgresista” por su trabajo público durante más de 30 años en defensa, protección y promoción de un ambiente sano.

Nicolas Albeiro Echeverry, Representante a la Cámara

Las enfermedades más comunes asociadas a la calidad del aire son las infecciones respiratorias agudas, el síndrome obstructivo bronquial, el asma, la rinitis y la faringitis, entre otras. Pero, de acuerdo con los expertos, la contaminación atmosférica también puede causar daños en los sistemas cardiovascular y digestivo, además que puede generar problemas de la vista, piel y cáncer.

“La invitación que nos hace el PNUMA no es para resolver un problema cosmético. La invitación a aumentar la consciencia pública sobre el aire puro está relacionada con los derechos fundamentales a la salud y a la vida, pues, según la Organización Mundial de la Salud –OMS-, anualmente mueren 1.7 millones de niños en el mundo por enfermedades asociadas con la contaminación ambiental”, plantea el “Econgresista”.

De acuerdo con la OMS, más de una cuarta parte de las defunciones de niños menores de cinco años son consecuencia de las condiciones insalubres del medio ambiente como contaminación del aire, exposición al humo de tabaco ajeno, la insalubridad del agua, la falta de saneamiento y la higiene inadecuada.

Nicolás Albeiro Echeverry Alvarán recuerda que el Valle de Aburrá tiene unas condiciones geográficas especiales que lo hacen más propenso a episodios ambientales que han debido enfrentarse con medidas como el pico y placa y día sin carro y sin moto. La invitación que hace, a propósito del “Día Internacional del Aire Limpio por un cielo azul”, es a tomar consciencia del uso de medios de transporte sostenibles como la bicicleta y, de no ser posible, más transporte público y menos transporte privado.