Por: Diego Calle Pérez.
Es una de las fechas que se agenda en el cronograma de festividades del año en todos los países del mundo. Al igual que el día de la madre y de San José, para no decir Padre. Es una festividad en la que se conmemora a las personas que hacen de la enseñanza su trabajo habitual.
En 1943, la primera Conferencia de Ministros y Directores de Educación de las Repúblicas Americanas, celebrada en Panamá, definieron el 11 de septiembre como el día clásico del Educador, pero algunos países con los años han modificado el calendario y Colombia destino el 15 de mayo. El Papa Pío XII proclamó a San Juan Bautista de la Salle como “patrono universal de todos los educadores”.
Grandes nombres de la historia han sido formados por educadores. Aristóteles, de Alejandro Magno. Andrés Bello, de Simón Bolívar. Otros pocas formaciones han llegado a tener y fueron presidentes de naciones. Algunos hablan de Marco Fidel Suárez y Julio Cesar Turbay Ayala a quién se le acuña la célebre frase: “corrupción a sus justas proporciones”
El trabajo del educador se ha modificado con los años. La Constitución Política y las nuevas leyes del Ministerio de Educación han hecho cambios que implican a los educandos y educadores. La educación Colombiana implementa modelos de otros países buscando con ello avanzar en los tratados de comercio. La modificación del escalafón docente ha dividido el gremio de los educadores afiliados a FECODE.
La evaluación de números a letras ha generado transformar didácticas del aprendizaje. Los estudiantes con dificultades de lectura y razonamiento matemático están en el aula con los educandos que avanzan con rapidez. Los estudiantes con dificultades en el comportamiento social son enviados a cobertura, -otro negocio que se han inventado-, y tampoco solucionan sus problemas. El estudiante tiene una tarifa y ésta se convierte en porcentajes para el ministerio. Nadie pierde. Todos pasan. Todos ponen. Pareciera frase de Antanas Mockus.
Los educadores de básica y media son los que forman y educan a los estudiantes que llegan a las universidades y a las carreras tecnológicas de tanta demanda actualmente. Hoy se habla de ciclos propedéuticos.
Los educadores se forman con maestrías y doctorados para llegar a formar aulas con 54 estudiantes que esperan el conocimiento y la orientación con el avance de la tecnología en computadores y fibra telefónica tan rápida como las propias noticias que se generan en el mundo actual.
Los nuevos retos de los educadores de la básica y la media son enormes. No solo superar los escalafones, sino el estar evaluando su trabajo para recibir un aumento que no compensa su inversión en formación. El trabajo del educador se renueva con los avances sociales y tecnológicos en la química y la física, en las Ciencias Sociales con la figura del Personero escolar y con los muchos medios de comunicación que ayudan y favorecen el aprender.
Estas son algunas de las muchas reflexiones que se hacen en el día del educador. Felicidades para los que hacen la labor.
