Algunos de los relevos de los congresistas son temporales y otros definitivos. Unos derivados de procesos judiciales y otros disciplinarios. El 64% de estos está vinculado a presuntos vínculos con grupos armados ilegales y el 7% a violaciones al régimen de inhabilidades e incompatibilidades.
De acuerdo con cifras que maneja la organización Congreso Visible, de los 51 legisladores que tuvieron que dejar su curul en forma definitiva, 65% lo hicieron al ser condenados por parapolítica. El 44% de las suspensiones han recaído en partidos de la coalición de Gobierno. Hay 18 relevos temporales.
Algunas de las nuevas caras en Cámara y Senado son las de Antonio Valencia Duque, Luz Helena Restrepo, Elías López, Jorge Visbal Martelo, Zaida Yanet Lindarte, Liliana Barrios Caballero, José Gonzalo Restrepo, Yolanda Pinto, Juan Carlos Vélez, Carlos Ávila Durán, Víctor Julio Vargas Polo.
Estas personas reemplazaron, entre otros, a Mauricio Pimiento, Álvaro Araújo Castro, Alfonso Campo Escobar, Dieb Maloof, Juan Manuel López, Jorge Luis Caballero, Jairo Merlano Fernández y Álvaro García Romero.
Pero también en este período se ha dado el único caso de un congresista -el representante a la Cámara, José Vicente Lozano, de Convergencia Ciudadana-, que renuncia por la elenopolítica al ser investigado, desde abril de 2008, por supuestos vínculos con el ELN.
Se ha registrado la muerte de siente congresistas: cuatro en Senado y tres en Cámara.
