Agencia Virtual de Prensa –AVP-. La representante a la Cámara, Regina Zuluaga Henao, respaldó la decisión del alcalde de Rionegro, Andrés Julián Rendón, de permitir la absorción del Hospital de primer nivel Gilberto Mejía Mejía por parte del Hospital de segundo nivel San Juan de Dios. Según había informado el Alcalde, en los últimos 20 meses fueron inyectados más de 1.300 millones de pesos al Hospital San Juan de Dios y cerca de 6.700 millones de pesos al Gilberto Mejía Mejía, como parte del programa de saneamiento fiscal y financiero, sin resultado positivo.
“La decisión, autorizada por el Honorable Concejo Municipal mediante Acuerdo 005 de 2017, le salva la vida al Gilberto Mejía Mejía cuya situación económica era insostenible. Su liquidación e inmediata absorción por parte del San Juan de Dios permite su saneamiento financiero y la viabilidad del servicio de salud para miles de habitantes de este municipio del Oriente antioqueño”, manifestó la Congresista de Centro Democrático.
Regina Zuluaga agregó que la decisión del acalde Rendón Cardona fue debidamente sustentada en un estudio técnico, jurídico y financiero que realizó la empresa Asesorías y Soluciones.
“El Alcalde escogió entre cuatro posibilidades que arrojó el estudio: liquidar el Hospital Gilberto Mejía Mejía; liquidar tanto el Gilberto Mejía como el Hospital San Juan de Dios; permitir que el San Juan de Dios absorba al Gilberto Mejía; o no hacer nada y dejar que la crisis de la salud que afecta al País entero acabe con ambas instituciones. La decisión fue la mejor y es la que hoy respaldamos y aplaudimos: liquidar el de primer nivel (Gilberto Mejía) y que sea absorbido por el de segundo nivel (San Juan de Dios) para que éste siga prestando servicios eficientes de salud tanto a los habitantes de Rionegro como del Oriente del Departamento”, explicó Zuluaga Henao.
La Representante de Centro Democrático ve con buenos ojos que con economía a escala, ya que sólo habrá un gerente para los dos hospitales, se seguirán atendiendo consulta general, servicios básicos de laboratorio y hospitalización de menor gravedad, además de seguir prestando atención a la red hospitalaria del Oriente, la cual atiende problemas de mayor complejidad.
Regina Zuluaga Henao expresó su beneplácito con la decisión de Andrés Julián Rendón. Pero recordó que esta vez se salvó un Hospital en crisis mediante la absorción de otro que no tiene riesgos fiscales y, en cambio, produce excedentes económicos. Pero llamó la atención sobre las aseguradoras que insisten en no pagar a tiempo y en los usuarios que reclaman servicios que no requieren. Ambos casos, entre otros, aportan en la crisis hospitalaria de Colombia.
