Balmore González Mira

Por: Balmore González Mira

Lo más fácil después de cualquier partido jugado es analizar lo que ha sucedido y no aceptar las equivocaciones previas. Por eso haré mis confesiones entremezcladas con algunos análisis de aciertos y yerros, pues todo lo anterior a las elecciones eran puras especulaciones. Primero dije que habría entre  18 y 19 millones de votos, acierto que me cobro y que quedó grabado en radio y televisión;  igualmente con entusiasmo partidista dije que Iván Duque ganaba en primera vuelta. Pensaba con el deseo. Manifesté permanentemente que Vargas Lleras le ganaba a Fajardo, acudiendo a una lógica que no se presentó y ahí nos rajamos al lado del monumental desacierto de Cifras y Conceptos  y sus proyecciones. Así mismo aceptamos que Fajardo nos derrotó a muchos con ese abultado resultado, el cual algunas encuestas pudieron leer acertadamente.  La derrota de Humberto De la Calle obedece a una mala lectura del país actual por parte de su campaña, pues el sentimiento nacional,  después de ratificarlo en la urnas el día del plebiscito, con un rotundo No, rechazó permanentemente un tratado de paz irresponsable, sin decir con ello que  estuviera en desacuerdo con la paz verdadera.

Caso aparte merece el caso de Germán Vargas Lleras, el gran varón de la política, el más curtido en cargos estatales y con más experiencia administrativa de los postulados,  dueño además de un partido político que sacó un buen número de congresistas el pasado 11 de marzo, a quien podemos calificar como el mayor perdedor de la primera vuelta, más que De la Calle, a quien todos los dirigentes de su partido abandonaron para apoyar a Vargas Lleras.

Petro es sin duda el más exitoso dirigente de la extrema izquierda  que haya tenido la historia de Colombia en las urnas, populista como el que más, inteligente, hábil y peligroso,  se ha metido peligrosamente a la segunda vuelta, donde muy seguramente estará entre el 40 al 45% del favor electoral el  17 de junio próximo.

Finalmente podemos decir que el único político y dirigente hoy en Colombia con capacidad de endoso de votos es Álvaro Uribe Vélez, quien condujo a Iván Duque al triunfo indiscutido en la primera vuelta y que como lo hemos dicho ha puesto presidente desde el 2002, cuando fue su primera elección, incluida la cuestionada de Oscar Iván Zuluaga en 2014, que dejó un sabor de fraude que aún hoy se siente en las urnas. Duque será el presidente de Colombia con un 55 a 60% de los votos de los colombianos.