“Respetamos, pero no compartimos, la decisión del secretario de Gobierno de Antioquia, Andrés Julián Rendón, de pasarse de Cambio Radical al Partido de la U”, dice el representante a la Cámara, Omar Flórez Vélez. Y agrega: “Mucho menos compartimos que haya convertido la Secretaría de Gobierno en directorio político, lo cual es una conducta censurable que debe ser investigada y severamente sancionada”. Y afirma contundentemente que “el Secretario de Gobierno hoy no nos representa; ha abusado de la confianza que tanto el Gobernador como nosotros le brindamos”.

También como consecuencia de los reacomodos que fueron liderados desde la Secretaría de Gobierno de Antioquia, el ex alcalde de Medellín le pide al gobernador Ramos la plenitud de garantías políticas en los diferentes municipios del departamento. Le solicita que vigile que no haya interferencias por parte de sus funcionarios. 

Omar Flórez Vélez recuerda que de acuerdo con los estatutos de Cambio Radical, la máxima orientación política a nivel departamental la tienen él, William Ortega y Mauricio Zuluaga, como Representantes a la Cámara, y Jorge Enrique Vélez, como Senador. “Antonio Álvarez Lleras, secretario General de Cambio Radical, informó en días pasados que los únicos miembros de la Colectividad con la facultad de promover e integrar los Directorios Departamentales y Municipales en Antioquia, son los congresistas”, concluye.

Vélez Flórez insiste en que Cambio Radical es un partido que se mantiene fuerte no sólo en Colombia, con 22 congresistas, sino en Antioquia con los diputados Jorge Iván Montoya y Rubén Darío Naranjo,  con los concejales de Medellín Juan David Arteaga y Rubén Darío Callejas, y con más de un centenar de alcaldes, concejales y miembros de Juntas Administradoras Locales.

Dice que a pesar del retiro de Cambio Radical de algunos dirigentes del oriente antioqueño, este partido sigue sólido e integrado por militantes comprometidos en aportar al bienestar de los colombianos, y en estimular un cambio radical en el ejercicio de la política, hoy en denigrante desprestigio.