Según Germán Jiménez, el primer acto de responsabilidad social empresarial de las organizaciones, es procurar un buen ambiente de trabajo para sus propios empleados. Personas equilibradas emocionalmente, que reciben un trato digno y felices con lo que hacen y con la manera como lo hacen, generan valor en forma natural.
Dice que eso es muy claro para las empresas. Sin embargo, falta más conciliación entre lo que se predica y lo que se practica. “El mayor vacío se presenta en el manejo de esa delicada fibra de las relaciones interpersonales. Y, sobre todo, en las muy frecuentes pésimas relaciones entre jefes-subalternos”.
“¿Cómo blindarse frente a estos peligros?”, se pregunta el periodista – escritor. Acto seguido, se responde: “El libro trae varias claves. La primera, es que cada individuo debe comenzar su propio proceso de cambio, ya sea subalterno o jefe. La segunda, que las empresas deben tomarse en serio el asunto, porque no sólo están dejando de explorar la mayor fuente de competitividad que puedan tener (la felicidad o al menos la armonía en el sitio de trabajo) sino que están corriendo el riesgo de ser visualizadas públicamente como refugios de acosadores laborales y, no se descarta, de ´asesinos morales´. Y la tercera, que si el cambio no se hace por voluntad propia, existen instrumentos legales, ya probados y avalados por la misma Corte Constitucional, que les permiten a las personas protegerse de los malos y acosadores jefes”.
Germán Jiménez Morales, es autor de los libros:
1. Tras las huellas del apagón
2. Colombia se apaga
3. El señor de las EPM
4. La calidad, una filosofía de vida
5. El jefe se jubila
6. Las intocables EPM
7. Naufragio cultural y otras historias de periodismo económico
8. Cincuenta años de control fiscal en Medellín (para los 50 años de la Contraloría General de Medellín)
9. Pescadero Ituango: La central de las ambiciones
10. Aghh… tengo unas ganas de pegarle a mi jefe
Germán es Comunicador Social – Periodista de la Universidad Pontificia Bolivariana; diplomado en Geopolítica y en Economía para no economistas en la Universidad Eafit.
Se inició en la Cámara de Comercio de Medellín, como redactor del Periódico Cifras y la Revista Antioqueña de Economía y Desarrollo. En el diario El Mundo fue editor económico y actualmente trabaja en El Colombiano en el Área de Investigaciones. En este medio ha formado parte de los equipos galardonados en dos ocasiones con el premio Simón Bolívar y en una ocasión con el Premio Rey de España.
En 1991 la Asociación Colombiana de Calidad Total le entregó una distinción por sus aportes a la promoción de la filosofía del mejoramiento continuo.
En 1998, el Círculo de Periodistas y Comunicadores Sociales de Antioquia –CIPA- le otorgó el Premio CIPA a la Excelencia Periodística, en la categoría Escritor Periodista.
En 2007, Cotelco Antioquia le entregó el Premio al Mejor Trabajo Periodístico, por su análisis "Explosión de hoteles en Medellín".
En 2008, Fenalco le otorgó el premio Periodista Económico Distinguido.