A Róber Bohórquez, concejal de Medellín por Cambio Radical, no le satisfizo la determinación del alcalde Aníbal Gaviria Correa de hacer una excepción con los padres, hijos y hermanos en la medida que desde diciembre del año pasado restringe el parrillero hombre en Medellín y el Valle de Aburrá.

A partir de este jueves, 1 de agosto de 2013, los parientes del motociclista en primero y segundo grado de consanguinidad, tendrán la misma libertad que han venido teniendo las mujeres. Sin embargo, para Bohórquez sigue siendo una medida socialmente excluyente con un mínimo impacto en la disminución de la violencia y la inseguridad.

El Corporado insiste en que la Administración de Medellín debe determinar, más allá de cualquier duda, cómo ha impactado realmente la restricción del parrillero hombre en la disminución de la criminalidad en la Ciudad Metropolitana.

También persiste en la solicitud que le viene haciendo al Alcalde de crear una Mesa de Concertación con los motociclistas. En carta enviada al alcalde Aníbal Gaviria, le expresa esta necesidad “dado el notorio impacto social y económico que ha sufrido el grupo poblacional de los motociclistas durante este tiempo”. Y argumenta que dicha Mesa de Concertación debe permitir “analizar de manera multidisciplinaria los resultados y alcances de la medida; propiciar un gran pacto ciudadano con este grupo poblacional y poder explorar alternativas diferentes a la medida restrictiva del parrillero hombre, que garanticen de manera eficaz la consolidación de una ciudad más segura”.

El Concejal plantea que las inversiones que viene adelantando la Administración de Medellín para mejorar la dotación e infraestructura de los organismos de seguridad y de justicia, haciéndose acompañar del Gobierno Nacional y fomentando canales de denuncia ciudadana, hacen innecesaria la medida restrictiva del parrillero hombre. “Levantarla no tendrá una manifestación negativa sobre las estadísticas de criminalidad de la Ciudad”, asegura Róber Bohórquez.

En su carta al Alcalde, Bohórquez Álvarez afirma que “está probado técnica y jurídicamente que el número de personas que delinquen a bordo de una motocicleta, es una cifra minoritaria (…) y la inmensa mayoría de motociclistas que son padres, hijos, estudiantes, deportistas y mensajeros, entre otros, no tienen por qué seguir soportando el estigma social y la coerción por parte de las autoridades competentes”, como consecuencia de la medida restrictiva.

“Mi compromiso con los diferentes grupos poblacionales de la ciudad es inquebrantable. Por tal razón, le ofrezco toda mi capacidad de trabajo, Señor Alcalde, para que aunadamente sigamos trabajando en la consolidación de una ciudad incluyente, donde no tengan que imponerse nuevamente limitaciones a los conciudadanos, para lograr los excelentes propósitos plasmados en el Plan de Desarrollo”, le expresó el concejal Róber Bohórquez al alcalde Aníbal Gaviria, convencido de que hay que levantar la restricción del parrillero hombre.