Por: Luis Pérez Gutiérrez
Los propósitos de los pueblos no basta volverlos un slogan, hay que trabajar para hacerlos realidad. Una meta social hermosa puede convertirse en una frustración gigante. Los sueños de los pueblos son para hacerlos realidad, no son para convertirlos en fracasos. Nos están acostumbrando a los Slogans y al mismo tiempo a los fracasos. En las metas de las grandes obras en Antioquia tenemos un álbum copioso de frustraciones y de retrasos.
A qué velocidad caminamos hacia el progreso? A Qué velocidad caminan los demás países? Avanzar despacio hoy es retroceder
Nuestro camino hacia el progreso es muy lento. Hoy somos más pobres que otros países que en el pasado los superábamos. Hay Naciones que tomaron la decisión de avanzar y trabajar sin concesiones y dejaron rezagada a Colombia.
Sutilmente están adormeciendo a la sociedad con slogans sin realidades.
Hace 60 años, Colombia tenía un ingreso per cápita más alto que Corea del Sur, que era solo de U$80 dólares al año. Hoy cada ciudadano de Corea del Sur tiene un ingreso per cápita de cerca de $40.000 dólares año.
Colombia tuvo Universidad primero que EEUU. Hoy ninguna universidad colombiana aparece entre las primeras 400 del mundo.
Hace 20 años se aprobó que para el 2015 Antioquia fuera la mejor esquina de América. Se volvió un slogan y ahora. Nada.
El Túnel de la Quiebra se hizo en 28 meses en 1929. Unos empezaron desde un lado de la montaña El Limón, y otros, desde el otro lado Santiago. Y a los 28 meses se encontraron. Colombia se distinguió en el mundo por la tecnología de túneles. Llego a ser el séptimo Túnel en el Mundo. Y ahí paramos. Para el Túnel de Occidente nos gastamos casi 12 años en construirlo teniendo más dinero y más tecnología disponible.
La velocidad con la que se realizan obras públicas en el Mundo es asombrosa. La China construyó un tren de alta velocidad entre Shanghái y Cantón de 2.300 kms en menos de tres años. El Metro de Medellín de baja velocidad y con el 1% de la longitud del Chino se demoró más de 20 años en construcción.
Tenemos que despertar. A Antioquia la están acostumbrando a pensar en pequeño. A contentarse con poco. A aplaudir la vanidad de dirigentes sin méritos.
En los últimos doce años poco, casi nada, se ha visto en Antioquia. No existe un legado sobresaliente en Infraestructura.
Las Autopistas de la Montaña durante 8 años no fueron realidad. Solo slogan. Ahora le han cambiado a Autopistas de la Prosperidad. Se acaba el Periodo del Presidente Santos y no tenemos nada. Y vamos para atrás: Ya no serán autopistas de doble calzada sino de una sola calzada.
El Túnel de Oriente y El Puerto de Urabá son dos Obras que Antioquia debió construir hace 30 años. Y como no se han hecho, las demás que se necesitan hacen fila en el cajón de la inequidad y la pobreza de Antioquia.
Será el Túnel de Oriente una vanidad de grandeza innecesaria?
El Túnel de Oriente le abre a Medellín y al Valle de Aburra las puertas del mundo. Medellín no es una ciudad competitiva sin el Aeropuerto José María Córdoba. La Competitividad de Medellin depende del Túnel..
La revolución del transporte aéreo de Pasajeros viene en camino. Mientras en el año 2011 se movilizaron por los aeropuertos del país 21.5 millones de pasajeros, en el 2012 fueron 24.7 millones. Y en 2013, se movilizaran 27.5 millones. La movilización aérea de pasajeros es el Sector de mayor crecimiento en Colombia:
Y el Oriente Antioqueño le ofrece a la gente de Medellín, pasar de una zona urbana contaminada, congestionada, con espacios verdes deprimidas, llegar en 15 minutos al disfrute de un paisaje bellísimo, con un medio ambiente envidiable, casi que inconseguible en el mundo.
Visto así, No es justo que sean los campesinos y la gente de Oriente quienes deban pagar valorización por una obra que beneficia a toda Antioquia. Y en lugar de Valorización podría estudiarse un impuestico aeroportuario por tiempo definido a los pasajeros, pues los usuarios somos los más favorecidos.
La suspensión del Túnel de Oriente fue un exabrupto del Ministerio de Medio Ambiente apoyado por el Gobernador de Antioquia Fajardo. Tarde o temprano, el Estado deberá reconocer su error que le costará a los sagrados dineros públicos muchos miles de millones de pesos. Los contratistas están sentados ganando dinero público sin trabajar por la suspensión temporal del túnel.
El Presidente Santos debería ordenar de inmediato el reinicio de las obras del Túnel. Hasta hoy no hay ninguna obra más importante para Antioquia que el Túnel de Oriente y el Puerto de Urabá.