Por: Margarita Restrepo.

Las denuncias por contenidos sexuales en internet, TV y medios digitales no tienen precedente alguno, la magnitud del problema se nos está saliendo de las manos y causando un daño enorme, en especial a nuestros niños y jóvenes. La pornografía tiene efectos nefastos en la familia, la comunidad y la cultura. Afecta adversamente a quien la consume, interviene en las relaciones interpersonales, produce una visión distorsionada de la sexualidad, la deshumaniza. Y aunque esta es una práctica muy antigua, por ejemplo, hay registro de cientos de frescos con contenido erótico explicito en las ruinas de Pompeya, no podemos desconocer sus consecuencias.

Toda pornografía, insensibiliza al espectador y condiciona a actos sexuales violentos, o que no son parte integral de la conducta humana. Neil Malamuth, de Donnerstein y Dolf Zillman, reconocidos investigadores de violencia sexual declararon que “ver estos materiales, sean violentos o no, aumenta experimentalmente la conducta agresiva del hombre contra la mujer y los niños y disminuye la sensibilidad, tanto del hombre como de la mujer”. Además, debemos tener en cuenta que la pornografía afecta más fuertemente a las personas emocionalmente perturbadas.

Quienes piensan que la pornografía es inofensiva o no tiene víctimas, les llegó la hora de bajarse de esa nube. Varios estudios han demostrados que todos los consumidores de estos materiales desarrollan el deseo de ver contenido cada vez más fuerte y perverso, así como los adictos a las drogas desean cada vez drogas más fuertes. Otros estudios nos dicen que los criminales son más propensos a cometer delitos si consumen pornografía. Trivializar los actos sexuales en que intervienen jóvenes o niños, es promover la pederastia, las prácticas sexuales de riesgo, los estereotipos de género, patrones de desigualdad y la adición.

Save The Children afirma que la edad promedio en que hoy en día los niños comienzan a consumir pornografía es desde los 8 años, lo que expone a nuestros jóvenes a sufrir alteraciones en su forma de comportarse, de relacionarse con los demás y en su forma de pensar. Pero sobre este tema y su gravedad poco se habla, ¿Porqué será? … algo tiene que ver la cantidad de dinero que mueve esta industria, en el 2006 sus ingresos mundiales declarados fueron de 97 billones de dólares, más que Google.

Nuestros hijos estarán siendo educados sexualmente en el mundo digital por fuentes cuyo único interés es económico y a eso se le suman lideres irresponsables con intereses políticos específicos que poco les interesa alterar negativamente el esquema mental, sicológico y social de nuestros hijos

Termino citando a Dawson, historiador cultural “La recuperación del control moral y el retorno del orden espiritual se han convertido en la actualidad en condición indispensable de la supervivencia humana”.

Necesitamos comenzar por reconocer que tenemos un problema para crear una estrategia.