Selene Botero insiste en que Teleantioquia no está en crisis porque no está endeudado y tiene con qué pagarle a sus empleados y acreedores. Explica que es un paciente con fiebre que se aliviará fácilmente haciendo ajustes internos como reducir viajes, renunciar a capacitaciones, no hacer inversiones en tecnología y optimizar el talento y el recurso con que actualmente cuenta. Todo, sin que se baje la calidad de la programación y, menos, la presencia regional en el Departamento.