Por: Germán Reyes Forero

En las motivaciones para decretar la Emergencia Social, gobierno Uribe – Palacio, el tema de los medicamentos y los sobrecostos por aquellos No-POS tuvo gran relevancia. Se acusó a las EPS e IPS de sobre facturar al Fosyga; sin embargo, el gobierno no explicó ni asumió responsabilidad alguna por este hecho.

Un tema crucial en cualquier intento de hacer una reforma a los sistemas de salud tiene que ver con los medicamentos e insumos. En las motivaciones para decretar la Emergencia Social, gobierno Uribe – Palacio, el tema de los medicamentos y los sobrecostos por aquellos No-POS tuvo gran relevancia. Se acusó a las EPS e IPS de sobre facturar al Fosyga; sin embargo, el gobierno no explicó ni asumió responsabilidad alguna por este hecho.

 

Desde el año 2007, tanto en el Congreso de la República como en Foros, se le había llamado la atención al ministro Diego Palacio Betancur sobre la inconveniencia de la Circular 04 de 2006 que cambia criterios básicos de control de precios a los medicamentos. Pero el Ministro y el Gobierno prefirieron mantener la desregulación de precios para favorecer a las multinacionales y lograr que ellas influenciaran en el Congreso de Estados Unidos para la aprobación del TLC.

Los efectos de la desregulación no se hicieron esperar. La industria farmacéutica disparó los precios y las EPS sobre facturaron los recobros al Fosyga. Pero también los precios de los medicamentos del POS sufrieron un alza injustificable colocándolos como los más caros de América Latina y varios países del mundo. La piñata fue para todos y el desfalco al erario público fue mayúsculo.

Sólo ahora se está conociendo la verdad, y eso por las denuncias y los estudios acuciosos de la Federación Médica y su Observatorio (www.fmc.encolombia.com), después de acciones jurídicas para que el Fosyga entregara la información.

Dentro de lo que hasta ahora se ha podido comprobar con algunos medicamentos, podríamos afirmar que el desfalco es peor que el de Agro Ingreso Seguro. Veamos algunos datos:

“De 2007 a 2009, el Sistema de Salud perdió más de $70.000 millones de pesos por sobreprecios en recobros por un solo producto: Rituximab; según la Federación Médica, las ganancias de Roche con éste producto, entre 2008 y 2010, tomando como referente los precios internacionales, superan los 143.000 millones de pesos.

Dentro de las investigaciones que se adelantan, se encontró que algunos tipos de Insulinas que están en el POS fueron informadas por las EPS al Fosyga para recobro, y para el año de 2009 dichos recobros correspondían al 83% del total. Sobre esta denuncia, la CRES (Comisión de Regulación en Salud) aceptó la denuncia pero, hasta ahora, no sabemos si las EPS ya devolvieron el dinero entregado por el Fosyga.

Igualmente, la Federación Médica denuncia que las resoluciones emitidas por el Gobierno nacional para “corregir” este desfalco no sólo son insuficientes sino inoperantes. Ellas son la Resolución 5229 del 14 de diciembre de 2010 y la Resolución 05 del 11 de enero de 2011 que corrige la anterior, en donde se fijan valores máximos de recobros sobre 20 medicamentos, entre ellos el Rituximad cuyo precio sigue estando por encima de los precios internacionales y, por tanto, las ganancias para las multinacionales por este concepto siguen acumulándose y el desfalco al Sistema de Salud continúa.

En carta al Ministro de la Protección Social, fechada 6 de marzo de 2011, el senador Jorge Robledo lo insta a denunciar una sobrefacturación de más de 825 mil millones de pesos en medicamentos:

“… De acuerdo con estudio del CID-IIC de la Universidad Nacional de Colombia, reconocido por el Ministerio de la Protección Social, tres EPS pertenecientes al mismo grupo –Saludcoop, Cafesalud y Cruz Blanca- cobraron por medicamentos en promedio 5,7 veces más que lo que cobraron las demás EPS en 2009. Mientras las tres EPS citadas facturaron y recibieron pagos del sistema de salud con un promedio de 207 mil pesos por afiliado, las 18 restantes cobraron 36 mil pesos por afiliado. La plata recibida por Saludcoop, Cafesalud y Cruz Blanca por encima del promedio de las demás EPS suma en total 825 mil millones de pesos, que podría ser el monto de la defraudación al patrimonio público.

‘El estudio de la Universidad Nacional de Colombia además señala –siempre de acuerdo con las cifras aportadas por las propias EPS- que estas diferencias en la facturación no se originan en medicamentos especiales ni en acciones de tutela, pues todos ellos hacen parte del Plan obligatorio de Salud (POS). El mayor valor de los 25 medicamentos más usados formulados por Saludcoop sobre el promedio de las demás EPS es de escándalo: Por ejemplo, 246% en Lovastatina, 227% en Loratadina, 135% en Omeprazol, 120% en Ácido Fólico, 99% en Enalapril, 87% en Acetaminofén, 37% en Diclifenaco y 34% en Ibuprofeno”, le recuerda el senador Robledo al mismo Mauricio Santamaría.

En su carta al ministro Santamaría, el senador del Polo le cuestiona por qué un problema que él conoce desde diciembre pasado no se lo ha informado a los colombianos. Y también le pregunta si el caso lo denunció, y en qué fecha, ante la Superintendencia de Salud, la Fiscalía y la Procuraduría, como es obvio que debió hacer…”.

La nueva reforma, la Ley 1438 del 19 de enero de 2011, en su Capítulo IV, artículos 86 al 91 y otros, reproduce los errores anteriores y no establece los correctivos que se han propuesto para evitar que las EPS y las Multinacionales Farmacéuticas sigan desangrando al Fosyga y al bolsillo de los colombianos.

Saludo el trabajo del senador del Polo Jorge Robledo y del Observatorio de la Federación Médica Colombiana (Observamed), su rigurosidad, seriedad y compromiso en la defensa de los dineros de la salud y el bienestar de los pacientes; y reitero la necesidad de exigir a las autoridades, incluida la Fiscalía General de Nación, una intervención seria que frene la corrupción en lo que podríamos denominar el “carrusel de los medicamentos”.