La calidad del aire tuvo una leve mejoría este domingo, 8 de marzo. Sin embargo, las medidas restrictivas anunciadas por el Área Metropolitana del Valle de Aburrá -como el pico y placa de seis dígitos y nueve horas diarias hasta el martes, 10 de marzo, y pico y placa de cinco dígitos todo el día a partir del miércoles, 11 de marzo- continúan en nueve de los 10 municipios metropolitanos, ya que Girardota no acató la decisión.

El “econgresista” Nicolás Albeiro Echeverry Alvarán está convencido de la importancia de medidas como el pico y placa, pues está técnica y científicamente demostrado que la contaminación metropolitana es consecuencia en un 82% de fuentes móviles y en un 18% de fuentes fijas.

No obstante, reconoce la importancia de que las industrias, que son fuentes fijas de contaminación, también sean intervenidas. Por eso, recuerda la citación hecha a los ministros de Transporte, del Medio Ambiente y de Hacienda y al Director Nacional de Planeación, con los directores de las Corporaciones Autónomas Regionales y Áreas Metropolitanas, además de secretarios de Movilidad, Salud y Medio Ambiente y directores territoriales de Planeación, para que hagan parte de una audiencia ampliada en la Comisión Quinta de la Cámara de Representantes para buscar solución integral al problema de contaminación que están sufriendo importantes regiones del País.

“Es cierto que las industrias asentadas en el Valle de Aburrá, muchas de ellas en Girardota, hacen apremiante conocer la verdad sobre cuáles de sus chimeneas son las que más contaminan, cuánto material nocivo arrojan y cuál es el impacto negativo en el aire de la Subregión. Pero no se pueden desconocer las medidas metropolitanas, sino buscar la solución. Por eso, entre otras estrategias, los Planes de Ordenamiento Territorial y los Planes Básicos de Ordenamiento Territorial sirven para poner barreras a las industrias contaminantes”, manifiesta el “econgresista” Echeverry Alvarán.

El Representante conservador invita a la corresponsabilidad de todas las entidades territoriales e instituciones competentes para encontrar soluciones integrales. Ya Corantioquia amplió medidas restrictivas para los 80 municipios de su jurisdicción, donde espera ejercer actividades de control y seguimiento a sus diferentes industrias, para ayudar a estabilizar y mejorar la calidad del aire, de la mano de medidas inevitables como el pico y placa.

“Garantizar la salud y la vida de los habitantes del Valle de Aburrá exige llegar a medidas impopulares como el cierre de algunas empresas y el pico placa, sin desestimar decisiones que, con fundamento técnico y científico, están tomando autoridades ambientales como el Área Metropolitana del Valle de Aburrá y Corantioquia”, concluye el “Econgresista”.