Rubén Darío Gómez, presidente de la Confederación General de Trabajo –CGT-, Antioquia, les pide a los congresistas que trabajen por la sociedad que los eligió: que dejen de pensar en sus propios intereses políticos y burocráticos.

Sobre la petición de desmonte del Escuadrón Móvil Antidisturbios –ESMAD-, el Presidente de la CGT – Antioquia dice que es evidente que las protestas son pacíficas hasta que hace presencia este Escuadrón de la Policía Nacional. Está convencido de que las marchas del 21 de noviembre en Medellín fueron pacíficas, creativas y culturales, precisamente porque el Comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá tomó la decisión de no sacar el ESMAD a las calles.

Caso contrario fue lo ocurrido en inmediaciones de la Universidad de Antioquia el mismo 21 de noviembre en horas de la tarde, al finalizar la jornada de protesta, cuando se presentaron disturbios con cuantiosos daños en el campus universitario. Según Gómez, fue la presencia del ESMAD la que ocasionó la reacción violenta.

A propósito de la muerte del estudiante Dilan Cruz como consecuencia de un disparo por parte de un policía del ESMAD, Rubén Darío Gómez espera que el País y, particularmente, manifestantes y Gobierno escuchen el clamor de la propia familia del joven muerto: que el episodio que terminó en fatalidad para Dilan sea una invitación a la concordia.