El concejal de Medellín, Roberto Cardona Álvarez, insiste en que la restricción del parrillero hombre no resuelve los problemas de seguridad y accidentalidad de la Ciudad. Lo que hacen las autoridades con esta prohibición y con la persecución permanente a los motociclistas y sus pasajeros, es convertirlos en sujetos de discriminación, vulnerándoles derechos fundamentales como el de la igualdad, el de la libre circulación, el del trabajo y el del debido proceso.
El Concejal dice que la difícil situación en que están inmersos los motociclistas se debe a que no existen políticas nacionales ni locales que regulen de manera coherente y justa el uso de la motocicleta.
“Para empezar, Colombia no cuenta con un efectivo sistema de control en la enseñanza teórico práctica de la conducción de motocicletas, mediante el cual se evalúe y certifique responsablemente la habilidad y conocimiento de las normas de tránsito de los conductores de estos vehículos”, precisa Cardona Álvarez.
Dice que son muy importantes los debates públicos como el que se hará este miércoles, 15 de julio, en el Concejo de Medellín, para que se produzcan normas que les permitan a las autoridades actuar de forma razonable y proporcional contra la delincuencia, sin afectar al motociclista que, generalmente, se ve injustamente hostigado y sancionado por supuesta violación de reglas que no conoce y que cambian de un día para otro y de una ciudad a otra.
Roberto Cardona insiste en crear una vía exclusiva para el tránsito de las motocicletas, como se está haciendo con las bicicletas. En lugares como Vietnam, Malasia y Taiwán se ha enfrentado con gran éxito la problemática de la movilidad segura de las motocicletas y la inseguridad desde las motocicletas, con vías exclusivas.
El Concejal reconoce que los accidentes de tránsito representan la segunda causa de las muertes violentas, y que en Medellín las motocicletas participan en cerca del 60 %. En 2014, por ejemplo, ocurrieron 45.409 accidentes; 26.222 fueron con motos. En lo corrido de este año van 8.630 accidentes; 5.190 han sido con motos.
“Pero no podemos olvidar que las motos se han convertido en aliadas del desarrollo económico de muchos colombianos: más de 700 mil derivan su sustento de estos vehículos. Cerca de un 55 % de las personas que adquieren una moto, busca incrementar sus ingresos. En los últimos cinco años, la moto ha pasado de ser un medio de transporte eficiente y económico, para convertirse en una herramienta de trabajo”, afirma el Corporado.
Roberto Cardona Álvarez confía en el sentido común y la buena voluntad de la Administración, de las autoridades de tránsito y de policía, de sus colegas concejales y de los legisladores, para llegar a políticas justas, sensatas y proporcionales en materia de seguridad y movilidad, sin olvidar que el 97 % de las motocicletas son empleadas por personas de bajos recursos como vehículos de trabajo y transporte.
