Por: Diego Calle Pérez
En los municipios de Villeta, Subachoque, Tenjo, Silvania en Cundinamarca se encuentran fincas de recreo al igual que en La Pintada, Caramanta, Rionegro, Marinilla en Antioquia. Sobresalen las fincas cafeteras de Supía, Riosucio, Aguadas y en Santa Rosa de Cabal los termales que disfrutan los que viven en Dosquebradas al ladito de Pereira, la que han llamado la ciudad señora: “Buga”, muy cerca de Tuluá, la ciudad que tiene al novelista de Cóndores no entierran todos los días.
Recorrido de un fragmento de país, con extensiones grandes en temas, que seguramente todos coinciden en haber votado por el que dijo Uribe y hoy muchos de los municipios nombrados, están en lista de espera para un taller Construyendo País con fiambre incluido.
Municipios que en sus alrededores, en veredas y corregimientos, albergan fincas de recreo y productoras, muchas de ellas, de cosechas que se venden para las plazas mayoristas. Municipios que cada año hacen su fiesta tradicional con los invitados Luis Alberto Posada, Darío Gómez, Arelis Henao y la Orquesta preferida por el comité organizador de la parranda. El conjunto Vallenato y la bachata para los jóvenes que son el futuro de la comarca.
Cada municipio se luce en las fiestas, que por demás, aprovechan para promocionar el turismo y alcalde con concejales hacen balance de su gestión. Los municipios, todos ellos, hacen alarde de sus fiestas organizadas por la administración local, con ayuda de empresas del pueblo y los apoyos de diferentes institutos descentralizados de las gobernaciones.
Nacionalismos locales son los que generan identidad y sentido de pertenencia por una región y por un municipio, cualquiera que sea su categoría o rango dentro de la administración. Surgen los nacionalismos locales cuando hablamos de ordenamiento territorial y de quitar la categoría de municipio, para pasar a corregimiento. Nacionalismos locales, son los que generan unidad entre los alcaldes para promover lo rural y facilitar desarrollo entre veredas que comparten límites territoriales con los pueblos vecinos.
Nacionalismos locales, no son solo fiestas y esperar la llegada del diputado que ayuda a veces a complicar las relaciones con los concejales. Nacionalismo local, son los muchos emprendimientos que se pueden impulsar en la economía naranja. Nacionalismo local, es la participación activa de un plan de gobierno municipal que tenga como propósito, dejar para continuar, procesos que la misma comunidad, se encarga de engranar buscando con ello el desarrollo local, subregional y departamental.
Nacionalismo local, es esa manera de presentar el municipio para el turismo, la recreación y las fiestas, como lo hacen muchos de los que invierten en propiedades, que luego venden por los tantos valores agregados que tiene el pueblo. Nacionalismo local, es una nueva propuesta político cultural de planificar el desarrollo de los municipios colombianos.