Según el estudio de INRIX – Global Traffic Scoreboard, que analiza la congestión y la movilidad en las principales ciudades del mundo, Medellín está en el puesto 18, entre 1.000 ciudades analizadas, como ciudad donde más tiempo pierde el ciudadano atrapado en “tacos” o “trancones”, precisamente por ser una de las más congestionadas del planeta.
El exalcalde de Medellín y exgobernador de Antioquia, Luis Pérez Gutiérrez, ya había visionado este problema desde 2011, cuando propuso construir una autopista aérea a lado y lado del Rio Medellín, entre Bello y Caldas, aprovechando que por Acuerdo del Concejo de la Ciudad en 1950, hay 60 metros separados, a lado y lado del Rio, para la movilidad.
Con recientes datos estadísticos como los de INRIX (2023), reforzados con la demostración que cada persona en promedio pierde 92 horas en “trancones”, Luis Pérez propone volver a una solución que la oposición “fajardista” de entonces calificó de inviable, como le había calificado de “garrucha” el proyecto de los metrocables, que hoy son ejemplo mundial: los segundos pisos viales.
“ESCRITO SEGUNDOS PISOS VIALES PARA MEDELLIN”
Por: Luis Pérez Gutiérrez.
Medellín necesita entrar a la era de los segundos pisos viales a lado y lado del rio Medellín. Hoy, Medellín es una de las 18 ciudades más congestionadas del planeta. Su tráfico se ha vuelto insoportable, asfixiante. Los alcaldes no han hecho vías nuevas que mejoren la movilidad. La belleza progresista de la ciudad se ve manchada por el tráfico caótico y desesperante sin horizontes de solución.
El informe INRIX (2023), que estudia el tráfico de 1.000 ciudades del planeta con el fin de investigar cuánto tiempo pierde la gente en los trancones de transporte, encontró a Medellín en el puesto 18 en el mundo; sin duda, un puesto indigno y humillante. Puesto 18 entre 1.000. Y a Bogotá en el puesto 6, peor. O sea, Bogotá y Medellín entre las ciudades del mundo donde más tiempo pierde el ciudadano atrapado en trancones. Medellín entre las ciudades más congestionadas del planeta.
El problema del tráfico en Medellín tiende a ser más grave cada año, y no se toman medidas para este mal. En 2022, cada persona en promedio perdió 92 horas en trancones. Y más grave, el tiempo que una persona pierde en los trancones de tránsito en Medellín aumentó el 72% entre 2021 y 2022. Inaguantable el deterioro del tráfico en la Ciudad; es cada día más ahogante y desesperante.
Otro dato que muestra que en tráfico Medellín va como el cangrejo, es que en 2022, Medellín ocupó el deshonroso segundo puesto entre todas las ciudades de Suramérica por mantener más tiempo a la gente atrapada en trancones.
El Metro solo tiene capacidad para movilizar el 20% de los habitantes. No hay manera de bajar de los carros o de las motos a los privados ni a los transportadores de carga, de aquí y a los nacionales. Hay que reaccionar y hacer inversiones urgentes y grandes en movilidad. O si no, Medellín se quedará vetusta en infraestructura para la movilidad.
Los segundos pisos viales, a lado y lado del río Medellín, son la gran solución para hacer una bella autopista aérea metropolitana, que recorra el área de Norte a sur y de sur a norte. Y así construir una ciudad metropolitana más tranquila, más contemporánea, más ambiental y más competitiva.
Así, la gente perderá menos tiempo atrapada en trancones. Se dinamiza la economía, se generan 80 mil nuevos empleos y la Ciudad gana en competitividad. A lado y lado del río, primer piso, se podrá construir un bello bulevar verde con ciclovías y vías para caminantes que recorran todos los municipios del Área Metropolitana. Se reduce la contaminación ambiental y, a medida que lleguen los vehículos eléctricos y de hidrógeno verde, el ruido y la contaminación del aire para los peatones se minimizan. La circulación y el orden público serán más seguras. Se podrá construir una vía solo para motos con el fin de bajar la accidentalidad y aumentar la comodidad y seguridad de los motociclistas. Será posible el desmonte del pico y placa. El pico y placa es una medida expropiatoria; cada día fastidia y se endurece más.
El Metrocable es una movilidad de segundo piso, es una vía aérea de movilidad, que ahora se ve como un éxito mundial y es ejemplo para todo el planeta. Cuando Luis Pérez alcalde, la creó para Medellín, nadie la creía posible y, con tono despectivo, algunos la llamaban la garrucha de Luis Pérez. Más de 15 países han copiado este novedoso, ágil y ambiental medio de transporte que no hace perder tiempo a la gente en trancones inútiles. El Metrocable es cero contaminación, cero trancones, cero inseguridad y los pobres viajan en primera clase.
Una autopista aérea metropolitana, al lado y lado del río, se financia de inmediato con inversionistas privados; no hay que comprar tierras; no hay problemas geológicos; no hay que paralizar el tráfico en su construcción, se paga en pocos años y quedará una renta multimillonaria de por vida para seguir desarrollando nuevos proyectos viales. Los segundos pisos viales colocarán a Medellín y su área metropolitana como ejemplo mundial de movilidad.
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