El alto número de contagios y de muertes que tan alarmado tiene al País en desarrollo del tercer pico de la pandemia del COVID-19 -y que, según las autoridades médicas, obedece a un subregistro porque deben ser más los contagios y las muertes que los reportados- es el cúmulo de varios factores que se ha sumado a la reapertura económica y social.

Leopoldo Giraldo, gerente del COVID-19 para Antioquia

Leopoldo Giraldo, gerente del COVID-19 para Antioquia, dice que sin medidas restrictivas a la movilidad no hay garantía de disminución de la propagación del coronavirus y sus funestas consecuencias para la salud y la vida.

“La movilidad está disparada. Con medidas como el 4/3 y el 5/2 logramos disminuir la movilidad hasta un 60%, con reducción de casos de contagio de 3.800 a 2.200. Pero hoy, con apertura total, han aumentado los niveles de contacto, los cuales han disparado el número de contagios, de camas de Unidades de Cuidados Intensivos ocupadas y de muertos. Las protestas sociales suman, como suma la apertura del comercio”, dijo en Sinergia Informativa, el Gerente del COVID-19 para Antioquia.

Leopoldo Giraldo reconoce la disyuntiva, pues la quiebra de empresas, el desempleo, la informalidad y el hambre se enfrentan a la urgencia de garantizarles la salud y la vida a los colombianos con un confinamiento obligado que el Estado no es capaz de sostener con subsidios y ayudas económicas permanentes, mientras se combate la pandemia.

“¿Cómo equilibrar? Ante la decisión de la reapertura económica y social, debemos preguntarnos si estamos siendo responsables con nosotros mismos, con la familia y la sociedad. El compromiso ya no es del Estado: debe ser individual. Cada vez que una persona se vacuna es un riesgo menos para la sociedad. Está demostrado con la población mayor de 70 años en la que ha disminuido la infección, el uso de los hospitales y la mortalidad. O sea que el esfuerzo de vacunarse muestra la esperanza de una solución cercana”, explica.

Giraldo cree que Antioquia va por buen camino hacia la Inmunidad de Rebaño, pues hasta el momento se han aplicado cerca de 2.600.000 dosis, de las cuales, más de 900.000 personas han recibido dos dosis. 4.700.000 es el número aproximado de antioqueños que deben ser vacunados para alcanzar el 70%, lo que significa que va un poco más del 38% de las inoculaciones necesarias para alcanzar la Inmunidad de Rebaño.

“Si las farmacéuticas le cumplen al Gobierno nacional, Antioquia tiene la capacidad de pasar 60.000 dosis por día a 90 mil biológicos diarios, porque tiene toda la logística para hacerlo y cumplir con la meta, antes de terminar el año”, asegura.

Leopoldo Giraldo insiste en que más allá de factores externos como la reapertura económica y social y la existencia de los biológicos necesarios para vacunar al mayor número de la población, la responsabilidad es individual poniendo en práctica permanentemente los protocolos de bioseguridad y recurriendo sin vacilación al puesto de vacunación el día que corresponda.

Al día 28 de junio, la ocupación de las camas de Unidades de Cuidados Intensivos era del 96.6%, con una población de 147 enfermos esperando una de estas camas.