Agencia Virtual de Prensa –AVP-. 15 días de cese de actividades académicas se cumplen en todo el País. Cerca de nueve millones de estudiantes han sufrido este paro protagonizado por los profesores. En Antioquia, la protesta afecta a cerca de 900 mil niños, niñas, adolescentes y jóvenes. Por eso, el diputado de Antioquia, Santiago Ospina, pide sensatez a las partes en negociación y espera que este jueves se materialice el preacuerdo alcanzado este miércoles.

El Diputado del Partido de la U entiende perfectamente el temor de los educadores agremiados a Fecode de perder la ventaja que el cese de actividades les brinda en la mesa de negociaciones, pero considera que vale la pena que tengan en cuenta el impacto negativo que esta forma de presión está generando en una población tan sensible como la conformada por los estudiantes.

Igualmente, como docente que es, Santiago Ospina le recuerda al Gobierno que no tiene herramienta más importante y necesaria que sus 325 mil maestros, 22 mil de ellos antioqueños. Y que no es posible que piense en educación de calidad si no recapacita sobre la urgencia de mejorar la calidad de sus profesores: calidad profesional y calidad de vida.

“La calidad de vida personal tiene que ver con el respeto a la dignidad de los profesores. Y sumada a la calidad profesional de nosotros, los docentes, redundarán en beneficio de una educación mejor para los cerca de nueve millones de educandos de las instituciones públicas del País”, afirma Santiago Ospina.

El Diputado de Antioquia está pensando en la buena fe del Gobierno y en su interés en que su política educativa se materialice. Y les propone a los educadores que también pongan en práctica el principio de la buena fe, ya que, además, tienen a su haber la mejor carta -representada en conocimiento, pedagogía y amor por el oficio-, necesaria para que se pueda prestar bien el servicio público de la educación.

“Esa buena fe, más la sensatez sobre lo que se puede pedir por parte de los docentes y lo que se debe entregar por parte del Gobierno, permitirán resolver lo más pronto posible este conflicto que está perjudicando, especialmente, a los estudiantes”, dice el diputado Ospina.

Santiago Ospina propone que una vez resuelto el conflicto del que debe salir beneficiada la comunidad educativa del País, Gobierno y profesores deberán sentarse a discutir temas como la jornada única escolar, la calidad en el sistema educativo, la preparación para pruebas internacionales, la formación de los estudiantes con pertinencia y acorde con un País en desarrollo y enfrentado a las demandas de la globalización y la competitividad.