Los diputados del Polo Democrático Alternativo, Jorge Gómez Gallego; del Partido Liberal, Adolfo León Palacio y Rodrigo Mesa Cadavid; del Partido de la U, Jorge Hernández Quiñones, Santiago Ospina y Rodrigo Mendoza; de Cambio Radical, Jorge Iván Montoya y Rubén Darío Naranjo; y de la Alianza Verde, Saúl Úsuga, suscribieron comunicado en el que afirman que no consideran oportuno que en el último año de gobierno y en un corto período de tiempo para la discusión, se presenten proyectos de tan hondo calado como el 300, “que tendrán repercusiones de fondo sobre la organización empresarial del Municipio de Medellín y sobre reconocidas empresas de carácter público que han demostrado eficiencia y eficacia en servicios fundamentales como salud, educación, recreación, seguridad, vivienda y desarrollo urbano, entre otros”.

En segundo lugar, plantearon que “es imposible que sin mediar un proceso público de discusión, socialización e información, que involucre a todos los actores sociales, se tomen decisiones que dejan abierta la posibilidad para transformar estas empresas en privadas o mixtas”.

Como corporados consideraron que no es pertinente que los Concejos y Asambleas se despojen de sus facultades, permitiéndole al ejecutivo de turno “emprender transformaciones de consecuencias impredecibles que pueden tener desafortunadas consecuencias sobre la calidad de vida de los ciudadanos y sobre el futuro de la actividad pública”.