El concejal de Medellín, Bernardo Alejandro Guerra Hoyos, manifestó al alcalde Aníbal Gaviria Correa su preocupación por el recorte presupuestal a programas sociales de la Secretaría de Inclusión Social y Familia como Buen Vivir en Familia y Crecer con Dignidad.
En carta dirigida al Mandatario, el Concejal expresó que se ha reunido con profesionales que vienen ejecutando el proyecto Buen Vivir en Familia mediante la modalidad de contratos de prestación de servicios y le han informado que en el presente año se firmó un primer contrato del 7 de enero al 30 de mayo y un segundo del 23 de julio al 7 de octubre, que se ha registrado recorte de profesionales, la no contratación de líderes gestores de las diferentes comunas y corregimientos y se han presentado disminuciones en los honorarios de algunos de los contratistas.
El concejal de Medellín, Bernardo Alejandro Guerra Hoyos, manifestó al alcalde Aníbal Gaviria Correa su preocupación por el recorte presupuestal a programas sociales de la Secretaría de Inclusión Social y Familia como Buen Vivir en Familia y Crecer con Dignidad.
En carta dirigida al Mandatario, el Concejal expresó que se ha reunido con profesionales que vienen ejecutando el proyecto Buen Vivir en Familia mediante la modalidad de contratos de prestación de servicios y le han informado que en el presente año se firmó un primer contrato del 7 de enero al 30 de mayo y un segundo del 23 de julio al 7 de octubre, que se ha registrado recorte de profesionales, la no contratación de líderes gestores de las diferentes comunas y corregimientos y se han presentado disminuciones en los honorarios de algunos de los contratistas.
Los profesionales, además, se quejan porque les toca ejecutar en dos meses de contrato las labores que inicialmente se programaron para seis meses.
Guerra Hoyos afirma que estos problemas se han traducido en deterioro de la calidad y oportunidad de los servicios ofrecidos a la comunidad, generando malestar e inconformidad en la misma.
Dijo que similar situación se registra con el proyecto Crecer con Dignidad, el cual es operado desde hace cinco años por la Facultad Nacional de Salud Pública, en donde los profesionales que lo sirven informan que se les ha hecho contratos hasta de ocho días, lo cual ha repercutido en una alta rotación de los mismos, generando incertidumbre y frustración ante la falta de seguimiento efectivo a las atenciones brindadas.
Solicitó al alcalde introducir los correctivos necesarios para garantizar la buena marcha de estos importantes proyectos.