El 4 de octubre es la fecha para celebrar la vida animal en cualquiera de sus formas y se hace en conmemoración de la existencia de San Francisco de Asís, considerado el primer ser humano que se concibió a sí mismo en relación con todas las cosas creadas, afirmando “que todos somos criaturas de Dios, incluyendo en esto toda la realidad animada e inanimada”.
Por tal motivo, la Organización Mundial de Protección Animal decidió en 1929 que el 4 de octubre fuera declarado Día Mundial de los Animales.
Por su parte, el Papa Juan Pablo II declaró en 1980 a San Francisco de Asís patrono de los animales y de los ecologistas, razón por la cual en muchos países se celebra el Día Mundial de los Animales con la bendición de las mascotas.
Se espera que este día sea un llamado a la consciencia de los humanos a respetar, defender, conservar, proteger y promover los derechos de los animales, que son en muchas ocasiones víctimas del egoísmo, el sadismo y la crueldad humana.
Colombia ha venido creando consciencia a través de diferentes programas y campañas, pero, especialmente, ha venido obligando a los colombianos, vía legislativa, a entender que los animales son seres sintientes: la Ley 1774 de 2016 es una de esas importantes leyes que castiga penalmente a quienes maltraten, hieran, hagan daño y maten a los animales.
Colombia sigue siendo primer país del mundo en aves, anfibios y mariposas; tercero en reptiles; y quinto en mamíferos. Por eso hay dispuestas 59 áreas de del Sistema de Parques Nacionales Naturales que buscan proteger especies endémicas, en peligro de extinción y amenazadas, las cuales representan la gran biodiversidad de Colombia ante un mundo cada vez más amenazado por el cambio climático y por la inconsciencia del hombre.
