El Candidato L-1 al Concejo de Medellín, Bernardo Alejandro Guerra Hoyos, dijo que no conciliará con el que denomina “falso cirujano plástico”, Carlos Ramos Corena, quien los demandó a él, al Municipio y al Concejo de Medellín por 1.260 millones de pesos. Ramos Corena pretende una Reparación Directa por daño al buen nombre y perjuicios sociales, morales, económicos, daño emergente y lucro cesante.
Guerra Hoyos recordó que el Cirujano Plástico está pedido en extradición por la justicia de los Estados Unidos. Agregó que en próximos días viajará a a la Embajada Norteamericana para hacer aportes probatorios que permitan acelerar el proceso.
Manifestó que no sólo Ramos Corena está pedido en extradición: “el proceso cobija a varios miembros de la cadena delincuencial que tanto daño ha causado a mujeres del País y del exterior y en donde aparecen vinculados captadores de pacientes, anestesiólogos, auxiliares de enfermería, instrumentadores y otros profesionales médicos”.
Cartel de la contratación de restaurantes escolares de regreso
Por otro lado, el concejal Bernardo Alejandro Guerra Hoyos insistió en su denuncia contra las empresas que conforman el cartel de la contratación en la licitación del programa de Restaurantes Escolares.
Dijo que la Fundación Alimentarte que viene de prestar un mal servicio en el Departamento del Chocó es la empresa que sirve de fachada para que nuevamente aparezca en escena la empresa Nutriser, la cual hace dos años debió ceder el contrato que tenía porque le quedó mal a 35 mil niños de Medellín, por no entregar los alimentos a tiempo y de mala calidad.
También dijo que en la contienda por los recursos públicos se encuentra Bayron Herrera, representante de Nutriendo a Medellín, experto en armar consorcios que no cuenta con la suficiente capacidad logística para atender adecuadamente a los niños y niñas de Medellín, localizados en los sectores más vulnerables de la ciudad.
