Ramón Elejalde Arbeláez

Cuando los tiempos que corren anuncian nubarrones sobre los medios impresos, EL MUNDO celebra sus 30 años en medio del reconocimiento de los colombianos y especialmente de los antioqueños. Los actos en Plaza Mayor el pasado lunes, ratificaron el compromiso del Periódico con la región y el afecto de todas las clases sociales para con tan importante medio de comunicación.

El esfuerzo de sus fundadores ha encontrado en su actual director y propietario la cristalización de sus sueños. Guillermo Gaviria Echeverri lleva 18 años entregado por entero a posicionar EL MUNDO en un departamento, que por tradición, ha leído otro medio. Incólume ha permanecido este esfuerzo diario frente a varias crisis económicas. Sus empleados, sus periodistas y sus columnistas han entregado todo de sí para que esta otra expresión de los antioqueños, tenga diariamente una nueva criatura para deleite e información de sus lectores. Los editoriales son el producto de una exquisita pluma, que no pasan desapercibidos para el lector, tampoco dejan en él una sensación de indiferencia. No hay transacción después de su lectura, se aprueba o se desaprueba. Son escritos con seriedad, con solidez conceptual y casi siempre con un agradable radicalismo, producto de las convicciones de su director.

En las páginas de opinión, que en sentir del doctor Guillermo Gaviria Echeverri, debe ser el sustento del periodismo moderno, hay diversidad de opciones ideológicas. Quienes frecuentamos hace años sus páginas, sabemos que jamás se nos ha cuestionado un escrito o una opinión. Siempre escribimos con entera libertad, eso sí, con responsabilidad, lo que le garantiza al lector pluralidad y respeto a la diversidad de pensamiento. La información económica, la internacional, la nacional, la regional, la municipal y la deportiva son precisas y como en todo medio moderno que se respete son condensadas y leíbles. Su columna semanal sobre el anecdotario y la picaresca administrativa y política, que con sorna y elegancia escribe Juan Paz es la más admirada de todas las de su estilo en Colombia. Los grandes medios nacionales hacen eco de sus escritos al día siguiente de su publicación, en un reconocimiento a la seriedad como se asume un genero de por sí difícil y complicado. El cambio sufrido por la página política en los primeros días de la dirección del doctor Gaviria Echeverri es otro de los éxitos del Periódico. La pastillita informativa, la crónica agradable sobre los hechos políticos y a veces las cargas de profundidad en los comentarios de Ignacio Mejía han hecho de esta sección una de las más leídas y consultadas. La Metro y El Observatorio son complementos de éxito a toda esta labor que hoy culmina los primeros 30 años de una empresa periodística que ya se incrustó en la historia de Antioquia.

Bien por la presencia de las autoridades de todo orden, encabezadas por el señor presidente de la República doctor Álvaro Uribe Vélez, en los actos conmemorativos. Bien por los reconocimientos que recibió el Director y el Periódico, especialmente de la Presidencia de la República, de la Cámara de Representantes, de la Alcaldía de Medellín y de la Universidad de Antioquia. ¡Un justo reconocimiento!