Por: Augusto Posada
En Colombia parece que no vamos a terminar de conocer la doble moral de los terroristas. Hace unos pocos días, vimos un video de Alfonso Cano diciendo que quería avanzar en un proceso de paz y que el país estaba preparado para superar los conflictos que nos desangran. Algunos creyeron en las palabras sosegadas del líder de las FARC hasta el punto incluso de insistir nuevamente en el diálogo y en la apertura de un proceso de paz con este grupo.
Otros, que hemos sido escépticos de los cantos de sirena de una banda criminal que busca protagonismo cada que hay un cambio de gobierno y se genera un ambiente de esperanza en el país, sabíamos que lo que buscaba las FARC era ganar tiempo para fortalecerse internamente y cambiar su ropaje de terroristas, a nivel internacional. Hoy lamentamos mucho, que a sólo un mes de haber aparecido ese video, este mismo grupo haya acribillado de manera criminal a miembros de nuestras fuerzas armadas, en ataques salvajes, en los que no se respeta el Derecho Internacional Humanitario.
Los colombianos tenemos que respaldar inequívocamente a nuestro gobierno y mantener la misma línea que en los ocho años pasados tenía acorralados a los terroristas. Si la intención que tienen estos grupos es mostrarse fortalecidos para llegar en mejores condiciones a una posible mesa de diálogo, están perdiendo su tiempo. Ni el gobierno, ni los demás poderes público, ni la ciudadanía nos vamos a dejar intimidar nuevamente por este tipo de acciones.
Seguiremos avanzado para la erradicación del terrorismo de nuestro territorio poniendo todo nuestro empeño y acompañamiento a nuestras fuerzas militares y de policía.