Agencia Virtual de Prensa –AVP-. 10 años después de haber sido puesto en práctica el Sistema Penal Oral Acusatorio (SPOA), que llegó a Colombia de la mano de un nuevo Código de Procedimiento Penal (Ley 906 de 2004), el porcentaje de impunidad en Colombia es del 97 por ciento, siendo uno de los mayores en el mundo.

Orfa Nelly Henao Giraldo, exdirectora del INPEC, Regional Antioquia – Chocó y hoy diputada de Antioquia, dice que lo paradójico es que las cárceles del País están hacinadas, pues los 138 establecimientos carcelarios que hay, deberían albergar a 78 mil internos, pero en ellos viven contra toda lógica física, mental, emocional y espiritual, cerca de 120 mil personas.

“Es paradójico porque el nuevo SPOA que buscaba agilizar la justicia penal,  esperando que fuera eficiente y garantista, hoy presenta un balance en el que lo que queda en claro es la aparente vulneración del principio de libertad (artículo 2º. de la Ley 906) y del derecho fundamental a la libertad (artículo 28 de la Constitución Política), porque los jueces de Control de Garantías no se niegan la posibilidad de dictar medidas de aseguramiento a granel, presionados por la sociedad y los medios de comunicación que quieren ver más gente en la cárcel como engañosa oposición a la impunidad”, dice Orfa Nelly Henao.

La también Ex Directora de las cárceles El Buen Pastor y El Pedregal explica que muchas de esas personas a las que se les encierra en las pocas cárceles colombianas antes de ser investigadas, enjuiciadas y condenadas, resultan inocentes, de tal manera que finalmente se les vulneran sus derechos y garantías fundamentales.

“Pero no sólo a ellos sino también a los mismos condenados, a quienes se les reduce cada vez más sus espacios, creando las condiciones perfectas para la violación de todos sus derechos constitucionales y fundamentales, y arrumándolos a todos, condenados y sindicados, en las peores condiciones con las que se les pisotea toda su dignidad humana”, expresa Henao Giraldo.

La Diputada conservadora concluye que el Sistema Penal Oral Acusatorio no ha cumplido, en una década, con su propósito de eficiencia para bajar el porcentaje de impunidad porque, entre otras razones, no hay suficientes fiscales y jueces. Pero tampoco ha sido garantista porque ante las presiones sociales y de los medios de comunicación, los jueces han rebozado las cárceles con presuntos inocentes. En este sentido, Orfa Nelly Henao hace eco de la advertencia del defensor del Pueblo, Jorge Armando Otálora “sobre la necesidad de modificar la normatividad para acabar con el populismo de la detención preventiva y asegurar que ese mecanismo sea utilizado con justicia pero a la vez con ponderación para administrar los procesos investigativos y aliviar el grave hacinamiento de la población sindicada” y condenada.

La diputada Orfa Nelly Henao expresa que la falta de infraestructura carcelaria es uno de los principales obstáculos en la garantía de dignidad para internos condenados y sindicados. “¿Qué tal que la impunidad no fuera del 97 por ciento? ¿Cómo sería el hacinamiento si hoy el promedio nacional es del 53 por ciento?”, se pregunta.