Francisco Galvis

Por: Francisco Galvis Ramos

Quizás hemos aprendido del sistema de los grandes partidos de los Estados Unidos de América, que a las colectividades políticas les conviene ejercitarse en la democracia interna para dirimir el asunto de las candidaturas unipersonales y a cuerpos colegiados. Allá se denominan Primarias y aquí Consultas que pueden ser abiertas o cerradas.

Tarde sí, porque al tópico todo nos llega tarde salvo la muerte que tiene fecha y hora prefijadas según sean los designios del que manda. Después de morir, la estimación de la expectativa de vida solo sirve para tasar indemnizaciones en favor de los vivos, compensaciones que no resucitan a nadie.

Los afiliados al CENTRO DEMOCRÁTICO concurriremos a las urnas en Consulta Interna cerrada este domingo 19 de abril, a votar para la integración de las lista de candidatos al Concejo de Medellín ya que, para fortuna, el asunto de la candidatura a la Alcaldía quedó resuelto hace unas semanas cuando facilité el proceso de desmonte de las restantes aspiraciones, por ya parecerme peregrinas e inconducentes, en favor del hoy candidato Juan Carlos Vélez Uribe. De no hacer sido así, todavía hoy el tema estaría pendiendo sobre el abismo.

A algunos podría parecerles en extremo peligroso el ejercicio de la democracia interna partidista por considerarla retozos que en no pocos casos conduzcan al establecimiento y consolidación de camarillas inamovibles, como cuando no se sacan a la almoneda de las urnas la totalidad de los escaños, para favorecer a los instituidos (Partido Conservador), en negación de aquel aserto de Aristóteles que dice: “la democracia ha surgido de la idea de que si los hombres son iguales en cualquier respecto, lo son en todos”.

Aun así me quedo con el estadista de estadistas sir Winston Churchill para quien “la democracia es el peor sistema de gobierno diseñado por el hombre, con excepción de todos los demás”. Por paradójico que pareciera no hay elección posible: democracia o democracia. Me parece a mí, que el hombre para vivir próximo a la libertad necesita vivir en democracia.

Nuestro partido da lecciones en el Congreso, en foros, talleres, en las redes sociales y plazas públicas, de cómo una colectividad de oposición ejerce de manera constructiva, puntual, inteligente y decorosa el disenso como, por ejemplo, lo dejó claro su caudillo Álvaro Uribe Vélez al oponerse a una reforma a la Constitución con nombre propio, como ha sido el caso de las pretendidas inhabilidades al Vicepresidente Germán Vargas Lleras.

Ahora nos corresponde a nosotros, la militancia llana, hacer presencia en las urnas y a eso vengo: a pedirle a los afiliados de Medellín su presencia responsable el domingo que viene a marcar en el tarjetón el candidato de sus preferencias y lo expreso independientemente de que yo sea el número 19. A quienes me deseen acompañar mi anticipada gratitud.

Señores afiliados: deben concurrir al puesto de votación que les haya sido habitual, llevando consigo únicamente la cédula de ciudadanía.

Tiro al aire: a propósito del 19 de abril, ese día estará cumpliendo años de vida Luis Alfredo Ramos Botero. Para él mi renovada solidaridad y que el año venidero se los podamos celebrar en libertad.